
En ambas naciones continúan las labores de búsqueda, aunque cada vez es menor la posibilidad de hallar sobrevivientes.
Los muertos tras el violento terremoto del pasado 6 de febrero en Turquía y Siria ascienden a 21 mil, mientras continúa búsqueda entre los escombros y son menos probables las posibilidades de encontrar sobrevivientes.
Según la Administración de Gestión de Desastres turcas los fallecidos en ese país ascienden a 18 mil 342, mientras que los operadores de rescate en Siria hallaron ya tres mil 500 cuerpos sin vida.
En las ciudades sirias de Latakia, Alepo y Hamas, las localidades sirias más afectadas, prosigue la remoción de escombros de los edificios destruidos y se recibe la ayuda internacional, según constató el corresponsal de Al Mayadeen en la zona.
El jueves 400 camiones de combustible iraquí ingresó a esa ciudad, a pesar de amenazas de ataques, informó el corresponsal de Al-Mayadeen en esa localidad.
Igualmente, un avión emiratí llegó al Aeropuerto Internacional de Damasco con 87 toneladas de ayuda humanitaria.
El sector médico necesita obtener los equipos y dispositivos necesarios para tratar a los ciudadanos afectados pero las sanciones occidentales al país se lo impiden, afirmó el ministro de Salud sirio, Ali Al-Ghobash.
En ese sentido y ante los reclamos internaciones, el Ministerio del Tesoro de EE. UU. anunció una flexibilización a la Ley César por un plazo de 180 días.
La decisión estará vigente hasta el próximo ocho de agosto y admite procesar o transferir fondos en nombre de personas de otros países hacia o desde Siria.
En tanto Francia y la Unión Europea también enviarán soporte humanitario, pero sin cambiar su posición hacia el gobierno sirio, puntualizaron.
Fuente: espanol.almayadeen.net